Crónica Anda Madrid – 26 Octubre de 2016 – María del Carmen del Olmo Segura

 

En este castizo barrio madrileño hemos reiniciado este nuevo ciclo de nuestras amenas visitas culturales. El buen tiempo nos acompañó e incluso al final de la visita, en la terraza de La Casa Encendida, nos vimos obligados a buscar la sombra ya que “el lorenzo” apretaba lo suyo.

Comenzamos el itinerario en la Plaza de Lavapiés donde el Dr. Cremades que fue nuestro guía, fijó nuestra atención en los nombres de las calles cercanas. Curiosamente están dedicadas a médicos como Miguel Servet,  Argumosa, Dr. Piga, Fourquet, quien inventó un estetoscopio conocido como “bocina de cordón”, que facilitaba la auscultación de los pacientes.

El trazado de sus calles es judío como tantos y tantos barrios de Europa que dejaron su impronta junto a la de los descendientes de las distintas facciones islamistas que se sucedieron durante los ocho siglos que duraron sus invasiones, por lo que las iglesias y sinagogas de la Hispania visigoda fueron asoladas o transformadas en mezquitas que a su vez desaparecieron cuando finalizó la Reconquista.

En esta plaza se encuentra actualmente el moderno edificio del teatro Valle Inclán que en tiempos, fue el teatro Chueca. En los años cincuenta del siglo pasado alguno de nosotros lo conocimos como “cine Chueca”, y cuando llegó “La Movida” le cambiaron el nombre por el de la “Sala Olimpia” dedicada a actuaciones y  discoteca.

En la esquina de la calle del Tribulete nos preguntó el Dr. Cremades si conocíamos el significado de esta curiosa palabra, el silencio fue unánime, y entonces nos dijo que nos fijásemos en el dibujo que aparece en el cartel de cerámica que indica el nombre de esta calle, mientras nos explicaba que era un juego parecido al de los bolos, llamado “tribulete”, varios asistentes recordaron distintos nombres tan curiosos como éste, que en sus lugares de procedencia también daban nombre a juegos parecidos.

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Nos dirigimos a la calle del Sombrerete para recorrerla en su totalidad, no sin antes escuchar la delirante historia del nombre de esta calle que merece la pena releerla por la importancia de los personajes y hechos históricos que sucedieron en el reinado de Felipe II.

La calle del Amparo perpendicular a Tribulete, también tiene una historia muy curiosa que nos contó el Dr. Cremades con todo lujo de detalles y que adjunto a continuación una dirección para que la memoricemos cómodamente.

http://www.secretosdemadrid.es/por-que-la-calla-del-amparo-se-llama-asi/

Esquina con la calle Mesón de Paredes pudimos admirar la famosa “Corrala”, hoy perfectamente rehabilitada. Alguno de nosotros, allá por los años 50 y 60, del pasado siglo, la conocimos en un estado de abandono lamentable pero que no impedía que sus viviendas estuvieran ocupadas en su totalidad.

Cerca de ésta corrala, se encuentran las ruinas del edificio que albergó “Las escuelas Pías” hasta que en los primeros días de la guerra civil del 36, como era costumbre entre los extremistas anticlericales, prendieron fuego a sus instalaciones y asesinaron  a varios  de sus frailes. Hoy, parte de las ruinas siguen en pie sin restaurar aunque cuidadas. Anexa a ellas se encuentra la biblioteca de la UNED en un edificio moderno que no nos fue permitido visitar.

El resto del solar se ha aprovechado para hacer una plaza donde se ha levantado una estatua al compositor Agustín Lara y que lógicamente lleva su nombre.

Hablar de este famoso músico sin mencionar a su esposa no menos famosa María Félix, es imposible, por lo que a tropel, casi todos los asistentes recordamos alguna que otra historia sentimental, casi todas escabrosas y no todas reales, pero que “La Doña” al igual que posteriormente sucedería con Ava Gadner, alimentaron las revistas del corazón de la época.

Seguramente con tanto revuelo y tanta anécdota descentramos a nuestro pacientísimo y amabilísimo guía, y pasamos sin darnos cuenta por “la casa de la vela” donde se encuentra un reloj de sol moderno pero curioso de ver.

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Llegamos a la calle Embajadores y entramos en el remodelado mercado de San Fernando pero que no nos pareció ni de lejos, que tuviera la vida del de San Antón o el de San Miguel.

La historia de El Parque Casino de la Reina, para muchos de los asistentes, fue un descubrimiento. Así como todos hemos visitado El Rastro, este parque que se encuentra al lado, hasta que el Dr. Cremades no nos la relató, la desconocíamos.

http://josesanpepe.blogspot.com.es/2012/08/el-casino-de-la-reina.html

Visitar la Tabacalera fue el siguiente objetivo de esta bonita mañana. Escuchando la historia de este edificio de boca de nuestro docto guía, quienes hemos visitado las tabacaleras cubanas, no pudimos más que añorar los tiempos en que sus aguerridas y valientes trabajadoras consiguieron tantas mejoras para ellas y sus hijos cuando la vida de las féminas era tan difícil.

Adjunto la direccion de Wikipedia por ser la más exhaustiva que he encontrado.

https://es.wikipedia.org/wiki/F%C3%A1brica_de_Tabacos_(Madrid)

Finalizamos la visita de este luminoso día en “La casa encendida” donde haciendo honor a su nombre si no nos hubiésemos refugiado en la sombra cuando visitamos su bonita terraza, también más de uno habríamos terminado la jornada “encendido”.

Quienes no perdonamos la cañita en buena compañía, tuvimos la suerte de degustar una tortilla de patata sencillamente más que rica al ladito de la casa encendida donde comieron los asistentes que pudieron alargar un poco más tan amena como instructiva jornada.

¡ Nos vemos en la próxima !

Un saludo

María del Carmen del Olmo Segura